martes, 17 de agosto de 2010

Son marchas cicloturistas, no carreras


Hay gente que se apunta a las marchas cicloturistas para hacer un recorrido bonito, muchas veces de más de 100 kilómetros, y otras veces de menos de 100 kilómetros. Muchas de estas personas se apuntan para disfrutar y no para competir. El tema que yo quiero tratar es este. ¿Por qué hay que competir en una marcha cicloturista? ¿Para qué están las carreras? Yo creo que no está bien que haya gente que se presente en la salida de una marcha como la Carlos Sastre o La Treparriscos para intentar ganarla. ¿Qué es esto?.

Vamos, señores, si una persona que va a una carrera y no es capaz de ganarla, ¿por qué tiene que probarse con los cicloturistas, esas personas que van a disfrutar? A ver, si la organización tratara a la marcha como una competición, y fueran personas profesionales, los cicloturistas ya saben donde se han metido, todo hay que decirlo. Pero, claro, también hay que decir que si los que compiten, ya sean profesionales o de categorías anteriores, se apuntan a marchas cicloturistas, tienen un coche delante, que es el que abre la marcha, y no les deja pasar de ahí, también tienen que saber dónde se han metido.

Yo creo que hay muchas personas a las que les da miedo apuntarse a marchas cicloturistas por el miedo a que se vaya demasiado deprisa y: o se descuelguen y la hagan solos, o les pille el cierre de control. Siempre (muy mal tienes que ir) encontraremos una personas o un grupillo que vaya igual de jo... que nosotros, y puede que encontremos alguno que vaya todavía peor, así que no hay que preocuparse. Luego, claro está, están las pájaras, los tirones, etc, que no son culpa ni de la marcha, ni de la organización, solo de los propios cicloturistas (en algunos casos, personas que van a competir, porque de cicloturistas, algunos, tienen poco).

Muchas marchas empezaron siendo eso, marchas cicloturistas, como la Quebrantahuesos, pero, con el control de tiempo, el chip y que van personas a picarse con los ex-profesionales que van, que lo único que quieren es dejar de competir y disfrutar del cicloturimo (como es el caso de Fernando Escartín, Abraham Olano o Eduardo Chozas, entre otros, que van a esta marcha), pues se acaba convirtiendo en una carrera. Ahora que estoy hablando de esta marcha, la Quebrantahuesos, ¿a que, para vosotros, Quebrantahuesos no es igual a carrera o a mucha velocidad o a sacarse los ojos?. Vale, siempre habrá alguno que vaya a su paso y, desde luego, yo lo felicito porque será el más listo de todos y el que, posiblemente, acabe salvando al cicloturismo. Por cierto, yo creo que, actualmente, viendo cómo está el panorama, este no es el mejor ejemplo, la verdad, porque, como dije antes, algunas organizaciones ya cogen su marcha como una competición, pero, os recuerdo que ésta fue, como la Carlos Sastre, la Bilbao-Bilbao o la Esquimales, una marcha cicloturista más no una competición.

¿Y los famosos controles de tiempo?

También me gustaría hablar de los controles de tiempo. Han causado y causan tanta espectación como el pinganillo. Para mí, tienen su parte positiva y su parte negativa. Aprovechando las clasificaciones que, actualmente, hay en casi todas las marchas cicloturistas, gracias a que muchos van a competir, puede servir para saber cómo estamos si, en un futuro, queremos competir nosotros (pero en competiciones, no en marchas). Pero, por otro lado, también tiene su parte negativa, porque, claro, como hay tiempo, muchos quieren hacerse la marcha en poco tiempo y son los que empiezan a poner ritmo, ritmo, hasta que se queda descolgado el coche que abre la marcha.

Pero también estoy un poco de acuerdo porque, sino, muchos solo harían el vago y se podrían tirar dos días para hacer, por ejemplo, 120 kilómetros.

Para ciclomarchas como la Carlos Sastre, podrían estar bien, pero yo creo que todos los cicloturistas que van a las marchas tienen un cuentakilómetros que les marca, por lo menos, los kilómetros y el tiempo invertido, ¿verdad? Pues con eso ya basta para poner en nuestra libreta de salidas en bici. Ahora bien, que somos unos hombres o unas mujeres que, en cuanto nos dan nuestro diploma, se lo enseñamos hasta al perro, pues bueno, yo diría que vamos a competir y que el chip es importate.

Entonces... Para tí... ¿Qué es el cicloturismo?

El cicloturismo es, para mí, disfrutar del paisaje mientras vamos subidos en la burra, ya sea de carretera o de montaña, a un ritmo que no sea de competir, pero tampoco sea “de vagos”, un ritmo al que se aguante bien.

En la única marcha que yo he visto cicloturismo de verdad es en la Bilbao-Bilbao: allí, no hubo ganadores ni sprint. Casi había que intentar que alguien llegara primero. En la Carlos Sastre también hubo muchísimo cicloturismo, os lo aseguro. Carlos se quedó atrás ayudando a los que se quedaban descolgados, empujándolos. Cada uno iba a su paso. Eso para mí es cicloturismo y, lo que es más importante, ayuda a los que no pueden, cosa que, en muchas ocasiones, tampoco hacemos. Una vez me alegró leer en una revista que, en la Quebrantahuesos, un chaval había pinchado y, para ayudarle, se pararon otros tres (me parece que eran tres). Y le dejaron todo para que pudiera hacerlo bien.

Un buen nombre para... ¿Cómo llamarlo?

La Carlos Sastre se llama Ciclomarcha Carlos Sastre. Ese nombre es ideal, y yo creo, en marchas como la Bilbao-Bilbao, donde el cicloturismo está asegurado, no se deberían llamar marchas, sino ciclomarchas.

Pero también, los que vayan a competir, podrían llamarlas ciclocarreras, pero yo creo que la Ciclocarrera Carlos Sastre, por ejemplo, no queda bien.

También se les podría llamar carreras contra cicloturistas, pero tampoco quedaría bien carrera contra cicloturistas Perico Delgado 2010, ¿verdad?

En definitiva

Vamos, a ver, esto se puede resumir con poco: el que quiera competir en una marcha (o ciclomarcha, depende del asunto), que compita, y, el que quiera disfrutar, que disfrute, pero que no tarde 2 días en hacer 120 kilómetros, ¿vale?.

A las marchas en las que el cicloturismo se va a vivir como cicloturismo y no como competición, es mejor llamarlas ciclomarchas.

Y, aunque no venga a cuento con este artículo, ¡hay que “papear” bien e hidratarse bien ants de las marchas cicloturistas, marchas competitivas con cicloturitas o como queráis llamarlo.


Nos vemos con la bici.

1 comentario:

Alejandro dijo...

No escribáis ningún comentario con lo del tipo de letra, que ya lo sé. He intentado editarlo, pero no me deja.

Saludos a todos y nos vemos en la carretera.